miércoles, mayo 27, 2009

¿Quieres que te cuente una historia? ¿No te parecen aburridas mis historias? ¿Un poco, sí? Entonces ¿qué tal tres historias? ¿No? ¿Mucho? Pero es lo que yo llamo la técnica narrativa, si te cuento una, la cosa queda incompleta, tiene que ser tres. De tres en tres. Nueve. Igual no funcionaría. Salud por eso. Había una vez un lugar que no se llamaba Perú, ni que Lima era su capital, una perla en el océano. Que tampoco tenía tantos habitantes como los que hay aquí. Ni que el cielo era un espanto latente. Ni que el olor a pescado era habitual desayuno matutino. Tampoco había ladrones incrustados en las instituciones ni ratas en los parques que por las tardes se llenaban de niños en bicicletas, scuters y pelotas de fútbol. Salud por eso. Por esa época próspera y el futuro parecía Miami. Salud, por eso.