BARRUNTO, ópera salsa. Herbert Corimanya, 23 de octubre 2019. CC España de Lima. |
Después de presentar mi libro en octubre tuve que pagar los daños / el primero era mi corazón porque la niña le había contado a su papá que ya no quería seguir siendo mi amigo / es más, le mostró todas las conversaciones de wasap que había tenido por meses / el tío, que es de mi edad, hacía planchas con los puños mientras mentaba mi nombre / . / . / .
Yo te mando a matar / me dijo mi editor / o te quiebro una pierna si te metes con mi hija menor de edad / luego le mostré su foto y me dijo que no parecía la edad que tenía / parece de más, es más: ya juega su pelota / . / . A mi jefe también le mostré su foto, acercó sus lentes a la pantalla y la vio simpática / está guapa la sambita / de qué hablan ? / . / . la verdad no hablaba de nada con ella, qué comí, que soñé / le digo cuánto me gusta y las ganas que tengo de hacerle un hijo / . / pero más allá de eso, nada / . / . /
Me miró serio mi jefe / aunque mi entusiasmo se reflejaba en él / Me voy a casar, le dije a ver si me sigue contratando. / . / .
El papá de la niña estaba en su casa pensando por dónde me iba a dar primero cuando me viera / entonces su perro pitbull se comenzó a pelear con un pequinés de la vecina / el tío intentó separarlo pero su perro terminó mordiéndole el talón de aquiles y le malogró la pierna / . / . /
Desde ese día no puede caminar y tiene riesgo de perder la pierna porque la brisa del mar de Cerro Azul no le ha dejado cicatrizar el tejido / . / . / Desde entonces puedo caminar tranquilo por el pueblo / . / pero igual tenía cuentas por pagar en Lima / el primero era el músico que había hecho la salsa en la obra de teatro de mi libro Barrunto, cuyo cajón dual mitad criollo mitad flamenco se perdió durante la fiesta de celebración / más que se perdió, me olvidé de sacarlo del taxi y el chofer aprovechó mi deplorable estado etílico / . / . /
El músico me citó en la estación Caja de Agua de tren eléctrico / de ahí tomamos un taxi y luego nos recogió una camioneta / dimos varias vueltas y llegamos a la fábrica de cajones / el dueño no estaba y con él teníamos que tratar el precio / porque plata no tenía / más que un libro Barrunto y explicarle lo que había pasado / demoró una hora y media en llegar / le expliqué, el amigo era un luthier muy conocido / a saber de la pizarra que había, sus cajones iban a parar a las manos de los más mostros del Perú: Alex Acuña, Chocolate, y demás.
Mientras el músico iba probando los cajones me fui a hablar con el dueño, el luthier / . / le dije que había sido un accidente / además que la presentación del libro había sido un desastre y de 40 libros que tenía que vender solo se vendieron 4 / . / el maestro me dijo que podía pagarlo en dos partes y eso me alivió / . / pasamos mi tarjeta de crédito y pusimos 36 cuotas / pero rebotó / entonces tuvimos que bajarle el monto y dejar mi DNI / . / . /
El músico encontró el cajón ideal / . / curioso que un cajón se lo hayan robado el día que nació Caitro Soto, de quien estoy haciendo un libro sobre su vida y milagros urbanos / . / . / un 23 de octubre se presentó la cuarta edición de Barrunto y una muestra teatral de adaptación del cuento a la acción dramática: una ópera salsa / . / .
El músico, que toca para varios cumbiamberos famosos / me dijo que se iba a Chile al día siguiente / luego de eso, no supe más de él / lo último fue algo que puso en su Facebook que las tiendas estaban cerradas y que había conocido a una venezolana / . / se tomó un selfie con ella y no volvió a publicar / . / . /
El luthier, dueño de la fábrica, fue asesinado días después, delante de sus hijos mientras los dejaba en el colegio en San Juan de Lurigancho / unos sicarios de dispararon en la cabeza / . / . /
La niña de Cerro Azul me escribió por la madrugada desde otro número / me dijo que su papito estaba llorando de dolor / que la pierna lo tenía loco y triste / ya se ha olvidado de usted, estimado / me dijo la niña / peor aún, el veterinario lo llamó a decirle que al perro lo tenían que sacrificar porque tenía un virus rabioso / la niña pensaba que ese era el motivo de su mal humor: la rabia del perro / . / . / .
La niña fue con su perro al veterinario que ya la esperaba con la jeringa en la mano / . / entregó a su perro que ya parecía asustado como que sabía que se iba a morir / la niña me llamó porque me dijo que yo era la única persona con quien tenía confianza / después de mi mamá, usted mi estimado / . / . estaba muy triste por su perro / tanto así que apenas el doctor le puso la inyección y el perro se durmió, las pulgas comenzaron a saltar / entonces la niña comenzó a matar pulga por pulga, así como solía hacerlo después de bañarlo / . / . / mató unas cuantas pulgas con las uñas de sus pulgares / .
Así triste se fue a trabajar al restaurante por la tarde / estaba triste pero también distraída / tanto por lo de su perro y su papá pero también por un chico que iba seguido al restaurante y era el hermano del alcalde, además de ser la mejor amiga de la dueña / iba seguido para alardear de su hotel, que quería llevarla a la niña a trabajar allá como anfitriona (de compañía) / . /
La niña atendía a la gente pero el hermano del alcalde la ponía nerviosa / por eso pateo una vitrina de vidrio y se rompió / peor aún los vidrios cayeron sobre una torta de chocolate / y ella tuvo que pagar todo / entonces la dueña le propuso al hermano del alcalde pagar los daños a cambio de una cita con la niña / la niña aceptó riéndose, curiosa y pendeja / . / luego me mostró los pantallazos de lo que conversa con el hermano del alcalde / entonces le dije qué ondas, que si iba a ser así la relación no íbamos a llegar al altar / como le había dicho a mi jefe / . / yo no tengo nada con usted mi estimado y tengo derecho a ilusionarme / . / . / pero mis muestras de amor ? mis poemas, mis joyitas de fantasía ? mis collages de papel ? / mis canciones desafinadas con mi guitarra de palo ? / No confunda las cosas estimado sino le diré a mi papá que me está acosando otra vez / Cómo que otra vez ? ... /
Después de esa madrugada la bloqueé en el Facebook y del wasap / pero de inmediato creé una cuenta falsa y le mandé invitación / . / . /
Ahora que estoy solo soltero maduro otra vez me han invitado a Chimbote / recuerdo con alegría ese puerto desde la vez que me invitaron a presentar Barrunto en el 2008 / la primera gira de los viejitos de barrón y el tour María Argüedas al mítico e histórico tres cabezas, el burdel donde el tayta intentó curar su depresión bajo una estricta terapia prostibular / será motivo para aplacar los llantos de este atolondrado corazón y chocón / . / . /